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¿Cómo beneficia este proceso a los administradores y sus instalaciones? Alineemos las seis áreas con las funciones de gestión de instalaciones.

Estrategia y planificación

Primero considere la estrategia y la planificación. Las actividades de gestión de activos de una organización deben alinearse con los objetivos generales de la instalación, proporcionando claridad a las prioridades y metas de la gestión de activos de la organización, así como una dirección mucho más clara sobre las formas de lograrlas. Este proceso es fundamental para cualquier organización y sienta las bases para los planes, la dotación de personal y la financiación a futuro.

Dentro de este elemento se encuentran los subelementos, incluida la política de gestión de activos de la organización, los objetivos y la planificación de la gestión de activos. Todos juegan un papel importante en los activos de las instalaciones, su gestión y las partes interesadas.

Toma de decisiones sobre la gestión de activos

Este elemento formaliza y documenta el proceso de toma de decisiones de la organización. Incluye detallar las inversiones de capital y las formas en que se toman esas decisiones considerando el valor total del ciclo de vida, la forma en que se llevan a cabo las operaciones y el mantenimiento, y la asignación de recursos. Una vez que los gerentes alcanzan este paso, esto los ayudará a tomar mejores decisiones al equilibrar costos, riesgos, oportunidades y desempeño.

El ciclo de vida total

Involucra todo el proceso de evaluación de los costos asociados totales de un activo. Este elemento incluye todo, desde el diseño hasta el desmantelamiento final. Resume la forma en que los activos se administran y operan en el nivel de servicio acordado mientras se optimiza el costo total de propiedad en un nivel de riesgo apropiado. Los subelementos en esta área incluyen gestión de riesgos, planes operativos, planes de mantenimiento, planificación de capital y estrategias y planes de desmantelamiento.

Información, planeación y estrategia

Luego viene la información, la planificación y la estrategia de los activos. Este elemento describe la forma en que la información sobre activos respalda la entrega de una estrategia y un objetivo de gestión de activos. Incluye el desarrollo de estándares que garantizan un enfoque coherente para capturar información precisa. Los datos de activos brindan a la organización la seguridad de que los registros son adecuados para su propósito y coherentes con los estándares de información de activos.

Organizaciones y personas

El elemento de organizaciones y personas involucra a las personas responsables de ejecutar las estrategias. Incumbe al equipo de liderazgo y gestión asegurar que la estructura, la competencia y la cultura de la organización logren los objetivos del plan de activos.

Riesgo y revisión

Finalmente viene el riesgo y la revisión. La gestión de riesgos se ha convertido en un aspecto integral de las buenas estrategias de gestión de activos y debieran integrarse en sus planes de gestión de activos de manera total o, al menos, parcialmente. Las operaciones con mejor desempeño reconocen la importancia del riesgo y lo consideran parte de su proceso de mejora continua. Medir, revisar y mejorar son factores críticos para el éxito.

Algunos conceptos son de sentido común, pero le sorprenderá la cantidad de organizaciones que no ven la necesidad de una versión nueva y mejorada de la gestión de activos

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